Resumen
La psicología positiva estudia el funcionamiento óptimo de las personas, utiliza el método científico para investigar las experiencias, rasgos e instituciones positivas. Las terapias “constructivas”, que incluyen la terapia centrada en soluciones, la narrativa y la colaborativa, se centran en construir sobre las excepciones a los problemas, indagan sobre las fortalezas y recursos de los clientes y parten de la base de que las personas quieren tener buenas relaciones y vidas plenas. Este artículo plantea por qué y cómo, a pesar de provenir de tradiciones intelectuales diferentes, la psicología positiva y las terapias constructivas pueden integrarse y enriquecerse mutuamente en la práctica terapéutica.